Datos personales

Mi foto
Hola muy buenas: Soy abierto, vitalista, enérgico, noble, equitativo, idealista, generoso, leal, buen organizador, protector, perfeccionista, con voluntad de poder y gran sentido del espectáculo y de lo dramático. Pero también despótico, egocéntrico, cruel, dogmático, intolerante, vanidoso, ansioso de poder y débil ante el halago. Si tienes suerte, te tocará mi mejor lado, si no, lo siento pero ni siquiera yo soy perfecto.

domingo, 19 de enero de 2014

EL BANQUETE

Tras leer el libro "El Banquete, expolio y desaparición de la Can" de Alberto Gil, Aritz Intxusta y Patxi Zamora; y tras asistir a una charla en el local San Juan Xar dada por los dos primeros, se sacan  unas conclusiones terribles.
Se podía pensar que los problemas de Caja Navarra se escudaban en la actual situación de crisis y los problemas que azotan a la banca, pero hay un trasfondo mucho mayor.
La sociedad navarra se indignó por el cobro de dietas de diferentes políticos navarros. Unos de manera "legal" otros de manera ilegal, unos las devolvieron, otros no, pero miembros tanto de Upn como del Psn cobraron por no hacer nada, salvo escuchar, cantidades importantes.
Sin embargo, pese a que estas dietas dejan el nivel ético de los citados políticos navarros a la altura del barro, a nivel económico no lo son tanto si analizamos el caso Can en su conjunto, ya que a nivel monetario estas dietas suponen la punta del iceberg de los más de mil millones de euros que se han dilapidado.
La cosa viene de muchos años atrás, cuando se empezaron a realizar las cosas con un criterio más político que económico. La unión de las antiguas Caja de Ahorros de Navarra y Caja Municipal de Pamplona fue un ejemplo de ello. Su fusión hacía más sencilla que fuese controlada por un mismo poder político y pese a que otras uniones eran más lógicas, se optó por esta opción.
En enero del 2002 llega Enrique Goñi, sin un gran curriculum que enseñar, pero con grandes padrinos, a la dirección de caja. Al poco tiempo dijo una frase: "A Caja Navarra no va a reconocerla ni la madre que la parió". En efecto ha sido de lo poco acertado que dijo e hizo en su años de mandato.
Con él empezó una cadena de favores entre políticos, banqueros y empresarios amigos patrocinada por los ahorros de la mayoría de los navarros. (Caja Navarra llegó a mover más del 50% de la cuota de mercando en Navarra).
El iluminado Goñi, pretendía una renovación total que chocaba con el resto de empleados y dirigentes con mucha más experiencia que él y que alucinaban con muchas de las propuestas que hacía el nuevo mandamás de la Caja, más preocupado por la apariencia que por la rentabilidad. Para solucionar esto, Enrique Goñi, empezó una política que es una de tres principales razones de los mil millones perdidos:

Las prejubilaciones:

Se fue rodeando de gente afín o de jóvenes sin experiencia que no pusiesen en tela de juicio sus peregrinas ideas, y fue haciendo una limpia de la gente que le cuestionaba, la cual en diez años supuso casi trescientos millones de euros. Se prescindía de mucha gente experimentada y válida para contratar a golpe de talonario a enchufados varios con escasa aportación y gran sueldo. ¡Se llegó a prejubilar a trabajadores con 46 y 47 años!
La segunda de las razones de este expolio fue:

La expansión:

Todo lo hacía a lo grande, así que de las 234 oficinas que tenía Caja Navarra en 2002, (199 de ellas en Navarra), se pasó a 379 en 2008 y al año siguiente, ya en plena crisis, se abrieron 33 más en el País Vasco, alcanzando en esa comunidad las 96, de las cuales ocho ni se llegaron a abrir y en muchas otras había más empleados que clientes. Tal era la situación que se llegaba a aconsejar a empresarios afines que hiciesen sus operaciones en oficinas del Pais Vasco para disimular.
Mención aparte en esta expansión merece la famosa oficina en Washington. Con los hoy imputados Urdangarín y la infanta Cristina de Borbón como padrinos de excepción, se inauguró a todo lujo, un local de 820 metros cuadrados en uno de los mejores lugares de la ciudad, a escasos cuatrocientos metros de la Casa Blanca. Tras tres años de alquiler la autoridad bancaria estadounidense nunca concedió la licencia para operar en aquel país.

La tercera parte importante en cuanto a cantidad económica fueron los numerosos créditos y operaciones para empresas de dudosa rentabilidad, pero en las que se veían favorecidos muchos empresarios del entorno directivo de Caja Navarra. Personajes como Ricardo Martí-Fluxa, Aldo Ocese o Alonso Ureba, u otros más locales como Javier Taberna, Antonio Catalán o el mismo Diario de Navarra, se vieron favorecidos en operaciones en ocasiones ruinosas para la Caja.

Si completamos esto con otros detalles como, sillas de cinco mil euros la unidad para adornar una oficina, o las charlas que organizaba Vialogos, empresa creada por la Caja para ser un referente económico en el estado y que no bajaban de 200.000 euros, no nos podemos extrañar del final que todos hemos podido ver. La anécdota más curiosa de estas charlas, fue la presencia de Joseph Stigliz,  premio Nobel de Economía en 2001, dio una charla el 23 de febrero de 2005 previendo, tres años antes de que sucediera, el estallido de la burbuja inmobiliaria y alertando que la economía del estado basada en el turismo y la construcción estaba agotada. Las fotos y el marketing funcionaron a todo trapo, pero parece que nadie escuchó realmente la charla, ya que Goñi y su secuaces hicieron todo lo contrario a lo que recomendaba el bueno de Stigliz. Como en la época del despotismo ilustrado, todo para el pueblo pero sin el pueblo.
Con todo esto, lo más trágico del asunto, es que a Navarra se le ha privado del instrumento financiero que era clave en su economía. A día de hoy, cualquier préstamo que un ciudadano navarro pida en una sucursal bancaria de la Can, se decide a muchos kilómetros a nuestras tierras, con lo que ha perdido un elemento esencial para el futuro económico de la comunidad.
Y aún con todo lo escrito todavía nos queda lo más grave de todo. Y es que toda esta gente que ha saqueado la caja siguen ocupando puestos de privilegio en consejos de administración y además muy bien remunerados con lo que podemos llegar a la triste conclusión de que robar en Navarra, no es que esté castigado sino que encima tiene premio.

Para terminar, tres frases:

"Los de Kontuz tendrían que estar todos en el talego" dicho por Roberto Jiménez, uno de los dietistas por parte del Psn.

"La caja tiene que tener a los trabajadores que ella quiera y el sistema de oposición no lo consigue" de Enrique Goñi.

"Una vez que acaben conmigo, irán a por tí" Lopez Merino, director de la Caja Municipal de Pamplona, a Lorenzo Riezu, director de la Can.

Que cada cual las juzgue.


viernes, 17 de enero de 2014

EGOERA BITXIA

Euskalduna naiz. Eta napartarra. Bi gauzak izatea ez da batere erreza Nafarroan. Joku zikinak edonon. Telebistan programazioa euskaraz Etb-n ikusi nahi dut eta ezin. Umetxoak ez dute marrazki bizidunak ikusteko aukera. Logroñon bai. Nafarroan ez.
Euskalerria irratiak hamasei urte ondoren epaiketa irabazi du eta Gorenak Iruñeko irrati lizentzien banaketa bertan behera utzi du. Baina momentuz lizentziarik gabe daude. Lapurtu ziotena orain Jimenez Losantosek erabiliko du.
Barcina, telebista ultra batean ingelesa euskeraren aurka erabiliz harro dabilela. Gehitu beharrean, beti kontra.
Nahiz eta zaila izan euskalduna izatea, jende askok D eredukoen alde apostua egiten du. Orduan, Nafarroako gobernutik zerbait egin behar. Bat batean, Diario de Navarra-n, El mundo-n eta Abc-en (hau hirukote) D ereduko txostena agertzen da. Ia hor erakusten duten irakasle gehienak terroristak direla da ondorioa. Atzo Guardia Zibilak ez duela egin Nafarroako hezkuntzari buruzko txostenik. Berdin da. Mina egina dago.
Eta nire euskara hizkuntza nafartarra izan arren, oztopoz betetako bidea egunero gainditu behar. Gaixo nazkagarriak!
Beti geratuko zaigu Madonna. (euskaraz abesten).